¿Por qué iba a negarlo?
Yo, no solo he tirado la primera piedra.
También la segunda, la tercera
y muy posiblemente,
la cuarta y quinta.
… Y no, no solo la he lanzado,
no escondí la mano, ya que lo hice siempre
tratando dar en
el blanco.
No estoy libre de culpa,
ni conozco al inocente.
No, no soy un hipócrita limitado.
Si he apedreado algo… a alguien,
jamás ha sido por accidente.
Así pues, culpable… ¿De qué?
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